El modelo basado en el dinero está fallando, es necesaria una nueva manera de trabajar. Las buenas personas lo están haciendo ya: se llama colaboración.
Muchos se han dado cuenta de que no tiene ningún sentido ser individualista y de que es absurdo que 7 mil millones de personas vivamos en el mismo planeta y estemos cada vez más distanciados.
¿Qué sentido tiene que dar la espalda a los miles, tal vez millones, de personas que viven en la misma ciudad?
Afortunadamente, las cosas están cambiando. Se están aplicando conceptos de la economía de colaboración y eso apunta hacia una nueva dirección: colaborar, compartir, ayudar, unión.
Con la llegada de Internet, el pequeño ya tiene voz y las tremendas posibilidades de conexión están haciendo que el mundo se una en una sola voz.